Teletrabajar, qué maravilla, ¿verdad? La posibilidad de trabajar desde donde quieras es una ventaja indiscutible en términos de calidad de vida. Pero no todo son ventajas, el teletrabajar también tiene algunos inconvenientes como el no contar con un espacio en el que trabajar única y exclusivamente o el dejar de socializar con personas de tu entorno laboral. Pero de todo inconveniente nace una solución, y esta solución se llama coworkings. En el post de hoy te contamos qué son, sus ventajas y sus inconvenientes.
Si eres nómada digital, freelance o simplemente teletrabajas, este post te interesa muchísimo. Si no, recuerda que el saber no ocupa lugar y nunca sabes lo que te deparará la vida, así que guarda este post para más tarde y quédate leyendo con nosotros. 👇🏼
¿Qué es un coworking?
Un coworking o espacio de cotrabajo es un lugar donde trabajan personas que ejercen su actividad de forma no presencial, ya sea por cuenta ajena o por cuenta propia. Este término apareció allá por el 2005 en San Francisco, cuando Brad Neuberg creó el primer espacio de coworking. A pesar de que fuera el primer coworking como tal, el concepto fue ideado 10 años antes en Berlín, con unos espacios conocidos como “hackerspaces”.
Desde hace una década, los coworkings están en continua evolución, y hoy en día se puede encontrar uno de ellos hasta en pueblos de 10.000 habitantes. Y es que la idea es, cuanto menos, maravillosa.
El hecho de juntar a diferentes profesionales de diferentes sectores en un mismo espacio fomenta las sinergias entre ellos, pudiendo crear proyectos innovadores y beneficiosos para toda la sociedad. Muchas relaciones empresariales y startups se han iniciado en coworkings. Pero de eso hablaremos en el siguiente punto.
Ventajas de los coworkings
Como mencionamos antes, los coworkings son un espacio genial en el que generar sinergias y conocer perfiles súper interesantes para tu desarrollo profesional o tu idea de negocio. Pero, además, tiene distintas ventajas fiscales que, si eres autónomo o PYME, te interesarán. Te dejamos con una lista de 5 ventajas de estos espacios:
- Son un buen lugar para separar tu vida profesional de tu vida laboral. Muchas personas que han cambiado el trabajo presencial por el teletrabajo mencionan que una de las principales desventajas de trabajar desde donde quieren es que, habitualmente, lo hacen desde el sofá de su casa o desde el escritorio de su habitación. No poder separar la vida laboral de la profesional acarrea consecuencias negativas tanto en el trabajo como en tu vida privada.
- Ideales para socializar. No estamos diciendo que los coworkings sean el nuevo espacio de tertulia, pero sí pueden ayudarte a conocer gente más allá de una videollamada por Teams o por Meet. Poder echarse el café (o el té) de media mañana en compañía es una maravilla, ¿o no?
- Tiene ventajas fiscales. Si eres profesional independiente del mundo digital sabrás que los gastos que te puedes desgravar se pueden contar con los dedos de una mano (incluso te sobraría alguno). Pero los coworkings son uno de esos gastos deducibles, ya que, como su nombre indica, es un espacio de trabajo.
- Podrás conocer a perfiles súper interesantes y hacer networking. Como ya hemos dicho, en estos espacios se da el ambiente perfecto para formalizar relaciones laborales duraderas y de calidad. Y, aunque ahora mismo no estés buscando hacer networking, guardar estos contactos para un futuro no está nada mal.
- Existen distintos coworkings que tienen espacios en diferentes ciudades del mundo, y algunos incluso gratuitos. Existen algunos en los que puedes pagar un fee mensual y acudir al que te apetezca (o al que más cerca te quede) en cada momento. Otros son 100% gratuitos, en España, por ejemplo, existen los de Santander o Imagine Bank.
Inconvenientes de los coworkings
No todo iban a ser ventajas, aunque te adelantamos que los inconvenientes son menores:
- Pueden resultar caros para alguien que está empezando. Si tu nivel de facturación como autónomo o PYME no es muy elevado, un coworking puede suponer un gasto elevado totalmente prescindible. En ese caso, tendrás que valorar si realmente te compensa o no invertir en un espacio de trabajo externo.
- Algunos tienen permanencia. Si eres nómada, este punto es un gran contra para ti. Puede que te interese estar únicamente 1 mes, pero esa opción tal vez no esté disponible.
- Si escoges las opciones más económicas, probablemente no tendrás un sitio fijo. Las mesas fijas suelen tener un precio más elevado.
- No existe una obligación real de asistir, por lo que tendrás que “obligarte” a ir. Algo así como lo que pasa con el gimnasio los primeros días.
- Tal vez encuentres un coworking en el que no encuentres perfiles que desarrollen la misma actividad que tú. Si no quieres que sea así, fíltralos por desarrollo de actividad o pregunta a alguien de tu círculo.
Y hasta aquí nuestro post de ventajas e inconvenientes sobre los coworkings. ¿Has probado alguno? ¡Nos encanta leer recomendaciones!