La transformación digital del tejido empresarial es uno de los grandes retos que tienen por delante la mayoría de países del mundo. En España, las pequeñas y medianas empresas representan alrededor del 95% de ese conglomerado, por lo que el reto es aún mayor. Ante esta situación, trazar una buena estrategia de marketing se antoja vital.
Qué duda cabe de que la pandemia del coronavirus ha acelerado el proceso de digitalización de nuestras empresas, un cambio que va acorde con el nuevo paradigma a la hora de entender el comportamiento de los usuarios y consumidores. Por ello, el marketing online debe ser la pieza sobre la que gire tu estrategia; estar visible en Internet ya no es solo una necesidad, para muchos negocios es la única forma de sobrevivir.
¿En qué te ayuda una estrategia de marketing?
La estrategia de marketing debe ser uno de los pilares de tu negocio. Se trata de un documento crítico y necesario para la viabilidad del mismo, tanto como lo es el plan de empresa.
Una vez tengas establecida tu hoja de ruta, será mucho más sencillo establecer unos objetivos realistas y medibles, que además te ayudarán a centrarte en lo realmente importante para que tu negocio sea rentable.
Con una buena estrategia de marketing sentarás las bases para incrementar tus ventas, favoreciendo el crecimiento de tu empresa a corto y medio plazo. También podrás conocer más sobre el mercado en el que se encuentra y sobre tus clientes.
Mediante las acciones concretas que establezcas en tu estrategia también podrás conseguir objetivos, como posicionar tu marca en la mente del cliente o diferenciarte de la competencia.
¿Qué tipos de estrategia puedes diseñar?
Dentro del pastel que conformará un plan de marketing deberás tener en cuenta numerosos tipos de estrategia, comenzando por cómo vas a segmentar a tu público (puedes ir a las masas o centrarte en un nicho). Es importante que conozcas bien a quién te diriges, cuáles son sus preocupaciones, sus temores, sus necesidades, etc. Así podrás adaptar tu propuesta de valor a cada segmento. Esta segmentación puede ser demográfica, geográfica, psicográfica o conductual.
Por su parte, la estrategia de posicionamiento está enfocada en definir cómo queremos que los consumidores perciban nuestra marca. Aquí es importante conocer cuáles son nuestros atributos, cómo nos posicionamos actualmente con respecto a nuestra competencia y cómo queremos posicionarnos en el futuro. Además de por atributo diferencial, la estrategia de posicionamiento puede hacerse en base a: nuestra relación calidad/precio, el beneficio que aporta nuestro producto, su uso, etc.
También es importante estudiar a la competencia y definir cómo será tu relación con ella en base al lugar que ocupa tu marca, producto o servicio.
Otra de las estrategias que no deberás obviar será la de fidelización. No basta con ofrecer un descuento en la próxima compra. Una vez que hemos captado al cliente debemos trabajar en fidelizarlo, estableciendo una relación a largo plazo y escuchando sus opiniones para poder satisfacer sus expectativas.
Sin lugar a dudas, deberás definir acciones para posicionar tu marca y penetrar en el mercado, para lo cual será indispensable apoyarse en el marketing online.
La estrategia digital como elemento diferenciador
En el mundo en el que vivimos, no tener presencia en la Red puede ser letal para el futuro de tu empresa. Ya conoces el dicho: ‘Si no sales en Google no existes’. Pero ya no basta con estar, es necesario ser visibles y transmitir los mensajes correctos en el momento y en el canal idóneos para tu público.
Para ello, la mejor receta es una estrategia digital en sintonía con tu plan de marketing, para que las acciones y la inversión que realices en Internet tengan el mayor retorno posible. Seguramente ya sabes que tienes que aparecer en Google y que tienes que generar contenido en redes sociales, ¿pero cómo vas a conseguirlo y cuáles son las redes sociales adecuadas para tu marca?
La respuesta a todo esto siempre debe estar en el plan de marketing de tu negocio. Nuestro consejo es que seas tú quien establezca los objetivos prioritarios para tu empresa, y que te apoyes en expertos del marketing y la comunicación para llevar a cabo la estrategia.